Medellín: de polo industrial a Hub mundial de innovación
Todos los procesos que viven las ciudades se ven reflejados en el tejido social y físico de sus territorios. Medellín no es la excepción. Conocida como la "capital industrial de Colombia" en el siglo XX, decidió dejar de soportar su desarrollo económico exclusivamente en las industrias tradicionales, generar un quiebre y promover una economía del conocimiento: esa que le da más valor a las ideas que a la mano de obra.
¿Cómo se llegó a esto?
¿Qué ruta recorrió Medellín para convertirse en referente mundial de innovación?
Para empezar, esa ciudad industrial de la que hablábamos tuvo que darse cuenta de que, sin innovación y diferenciación, no iba a ser competitiva en el mundo globalizado. El resto es una suma de decisiones políticas y condiciones pre-existentes en el territorio: la Administración Municipal creó una entidad como Ruta N para promover los negocios basados en ciencia, tecnología e innovación pero, al mismo tiempo, Medellín contaba con las condiciones necesarias para que esto ocurriese (algunas de las mejores universidades y de los principales grupos económicos del país trabajando desde aquí y un sector privado fuertemente comprometido con el desarrollo de la región).
Al igual que las ciudades con índices más desarrollados, lo primero que se hizo fue promover una política pública para darle una ruta clara a los esfuerzos en CT+i. En un trabajo conjunto con investigadores, empresarios sector público y los demás actores del ecosistema de innovación, nace el Plan de Ciencia, Tecnología e Innovación de Medellín. Este plan es la guía de la ciudad en sus apuesta por la innovación y prioriza tres mercados estratégicos en los que se identificaron oportunidades: salud, energía y TIC.
El establecimiento de la política pública de ciencia, tecnología e innovación, y su constante actualización por medio del Observatorio CT+i, le permitió a la ciudad trazarse unos indicadores de impacto que la llevarán a cumplir su principal objetivo: mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de Medellín a través de la generación de empleos calificados y el aumento del ingreso per cápita.